Desde que se oficializó que Martin Gastón Demichelis dejaba su comodidad en Munich para aceptar el enorme desafío de ser el DT sucesor nada menos que de Marcelo Gallardo (el técnico mas ganador de la historia de River), las comparaciones se multiplicaron y eran casi inevitables partiendo desde la prensa hasta los propios hinchas.
Hay características en común que son evidentes. Ambos son hombres de la casa, salieron campeones y portan el ADN Riverplatense en todos los aspectos que se relacionan con la parte humana y por supuesto con la visión futbolística. Sin embargo rápidamente se comenzaron a percibir algunas pequeñas diferencias en la metodología de trabajo del actual entrenador y en sus planteos tácticos dependiendo el rival, que en definitiva buscan los mismos objetivos que se alcanzaron en la era del Muñeco.
No es común que un nuevo entrenador explique detalladamente tan pronto se calzó el buzo de entrenador, cuales serían los pilares en los que se sostendría su gestión.
Y vaya si estamos desacostumbrados a que alguien abra los detalles de su planificación y la cumpla rápidamente.
En su primera declaración, aclaró que se apalancaría en la estructura que el Muñeco había construido para intentar dar seguimiento a ese proceso pero con su impronta, mucho trabajo y pidiéndole a los hinchas ¨seguir creyendo¨casi como describiendo el comienzo de una nueva temporada de la serie Gallardiana que terminaba en Octubre 2022 con un ¨to be continued..¨
Su deseo de un River ofensivo pero con mayor equilibrio defensivo que el último del 2022; la necesidad de ver a todos los jugadores antes de tomar decisiones; el armado de un selectivo con foco en cuestiones técnicas y tácticas conformado por jugadores de 4ta, 5ta y 6ta división para trabajar junto a la reserva y hasta con la primera en determinadas circunstancias; programar entrenamientos el día después de cada partido para analizar lo sucedido y regenerar rápidamente a quienes fueron titulares, fueron su anticipo desde la palabra.
Su experiencia en las divisiones formativas del Bayern Munich, prometían una especial atención en las jóvenes promesas del club y así es como vemos su seguimiento junto con Marcelo Escudero a cargo de la reserva y Edgardo Brisa (hombre de confianza del DT a cargo del selectivo).
Todo esto que Micho explicó al inicio de su ciclo, se materializó rápidamente, y llegaba la hora de conocer su mano en la conformación futbolística del equipo al comenzar a rodar la pelota, que es la que en definitiva decide el destino de todos en este complejo mundo del fútbol.
Y no tardó en verse su idea reflejada en el verde césped mientras algunos chicaneaban con su estilo demasiado¨alemanizado¨para estas pampas.
Cual es la idea que se vió reflejada al comenzar la competencia?
La idea de un River protagonista en todos los partidos no importa la cancha ni las circunstancias.
El buen trato de la pelota para imponerse desde un juego asociativo sometiendo al rival con buen ritmo pero retrocediendo algunos metros en determinados momentos de los partidos para ocupar mejor los espacios.
Salida limpia jugando desde el fondo buscando el pase entre líneas que rompa la presión del rival, siempre condicionado a la condición numérica en esa salida.
Laterales con función de ataque pero con recorrido completo para no descuidar la banda y no aferrándose a jugar con extremos. La incorporación de Enzo Diaz es prueba de ello. Un jugador que promete un futuro de liderazgo dentro y fuera de la cancha por su juego y personalidad.
El doble pivote en el medio para dar auxilio en la contención al líder y capitán Enzo Perez con el ingreso de Rodrigo Aliendro, o en caso de rotación con Nicolás De La Cruz y Agustín Palavecino ante la ausencia por lesión de Matías Kranevitter y Bruno Zuculini.
La posición de Esequiel Barco para romper líneas rivales con su desequilibrio en el uno contra uno a espaldas de los volantes rivales.
La confianza que le brindó a Nacho Fernandez para ser el conductor, a Gonzalez Pirez para revertir su imagen del semestre pasado al igual que a Paradela y al mismísimo Barco.
La decisión del dibujo dependiendo el rival, saliendo con 1 o 2 puntas pero siempre con los volantes llegando a posición de gol sin importar el sistema táctico (el 50% de los goles de la era Demichelis fueron convertidos por los delanteros y el resto por volantes o defensores)
Y la idea comenzó a fluir a pesar de haber tenido en sus primeros 15 partidos oficiales algún que otro traspié, pero que desde la fría e inapelable estadística River está puntero a 6 puntos del escolta y a 16 puntos del clásico rival, con el 80% de rendimiento (12PG / 15PJ) y con el agregado de haber alcanzado un récord en el profesionalismo de 7 partidos ganados en forma consecutiva sin recibir goles en contra.
Tabla de posiciones de la LPF
Mientras el mundo del fútbol ahora se deshace en elogios para Martin Demichelis y su cuerpo técnico, es el propio entrenador el que baja a todos al llano recordando que aún no se ganó absolutamente nada, que resta mas de la mitad del torneo y que el objetivo de la Copa aún está en pañales en una zona bravísima que no comenzó bien en la altura de La Paz. Muchos compromisos por delante.
Sabemos que siempre lo más difícil es sostenerse, que los rivales comenzarán a encontrarle la vuelta a la forma de jugar de River, y que no se podrá ganar siempre.
De lo que estamos seguros es que el método es lo mas importante que habrá que sostener porque para buscar el resultado como consecuencia de ese método asociado al buen fútbol. El resultadismo como único fin nunca fue lo nuestro, y Demichelis lo sabe con claridad. Los hinchas también lo saben. Será por eso que el propio DT dice que no es su equipo, ¨Es el River de la gente¨.
Peter Drucker señalaba que la mejor manera de predecir el futuro es creándolo y por esa senda vamos sin dejar nunca de creer e ir por más...
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